En el post anterior hablamos
sobre recomendaciones generales para mantener un buen nivel de seguridad en el
hogar.
Hoy vamos a ser un poquito más
específicos y vamos a hablar sobre otro tipo de adaptaciones que nos pueden
facilitar mucho la vida si las utilizamos correctamente.
Seguridad en la cocina:
Podemos
colocar detectores de humo y/o gas especialmente indicados cuando hay presencia
de olvidos.
En casos
más severos podemos sustituir el uso de la cocina de gas o vitrocerámica por el
microondas.
Tener a
mano una silla o banqueta que nos permita hacer parte de las tareas sentados.
Así evitamos la aparición de fatiga.
Utilizar
utensilios ligeros. Esto está especialmente indicado en personas que tengan
disminuída la fuerza.
Evitar
tener muchos utensilios que no se utilizan. Dejar siempre más accesibles los de
uso diario.
De forma más especifica se podrán utilizar
engrosadores para los mangos, tablas de corte antideslizantes, abridores de
botes, etc.
Seguridad en el baño:
El baño es uno de los puntos negros de la vivienda, siendo el
lugar donde puede producirse un mayor número de caídas.
Algunos consejos son:
-
Utilización de plato de ducha en lugar de bañera.
-
En el caso de no ser posible sustituir la bañera podemos
utilizar una silla giratoria de bañera que nos permitirá acceder a la misma en
posición sentado.
-
En el recinto de la ducha podemos colocar asideros
y/o asiento.
De forma general además:
o
Colocar estantería a la altura adecuada para los
utensilios de higiene.
o
Utilizar botes pequeños para disminuir el peso de
los mismos.
o
Uso de grifos monomando y si es posible de
regulación automática de temperatura.
o
Realizar la actividad de secarse y vestirse en
posición sentado.
-
En cuanto al wc si existen problemas para
levantarse del mismo se puede colocar un elevador para facilitar la puesta en
pie y/o una barra de apoyo que podrá ser fija o abatible.
Seguridad en el
dormitorio:
-
Los problemas más frecuentes en el dormitorio pasan
por la dificultad para entrar y salir de la cama. Para ello podemos colocar barandillas que
eviten caídas desde la cama.
-
En el caso de dificultades para moverse dentro de
la cama y levantarse de la misma existen en el mercado asideros diseñados para
tal fin.
- En casos
graves de movilidad se recomienda el uso de camas articuladas, que además de
ser más cómodas para los enfermos, facilitan la vida de manera significativa al
cuidador.
- Otros
problemas pueden aparecer para coger la ropa del armario. En este caso podemos
bajar la altura de la barra o bien utilizar un descolgador extensible.
Como se dijo anteriormente, se
recomienda que estas adaptaciones existentes en el mercado sean valoradas y
pautadas por un profesional para asegurarnos la idoneidad de las mismas.
Esperamos que estas recomendaciones os hayan sido de utilidad.
¡Nos leemos!